Sencillo y práctico es este espacio destinado a cuarto de lavado. Máximo almacenamiento en columnas de suelo a techo que resuelven las escobas, los productos de limpieza y la colada con lavadora y secadora en torre.
En el interior del espacio la luz rebota en el mobiliario blanco brillo dando sensación de amplitud y limpieza, la puerta de cristal al ácido aligera la entrada y el espacio interior, y los iconos del lavado aportan ese toque personal y diferente.
Nadia Ramos